Buddha o Buda significa “el que despertó”, y se le asigna al fundador del budismo. Él no era un dios ni era un profeta ni un mesías, sino un ser humano normal que, con un gran esfuerzo, alcanzó un estado de perfecta sabiduría y completa sensibilidad hacia todo lo que existe.
A este estado tradicionalmente se le denomina “Iluminación” y es la esencia de la enseñanza budista. Todas sus doctrinas y prácticas están hechas para ayudar al ser humano a llegar a su propio potencial de Iluminación.
Desde los tiempos del Buddha muchos otros hombres y mujeres también han alcanzado el estado de iluminación, sin embargo, el título de “el Buda” se reserva generalmente para el pionero, Siddharta Gautama, el hombre que descubrió el sendero a la iluminación y que indicó el camino para que otros lo siguieran.