“Boa que digería un elefante”

Una de mis obras preferidas es el famoso libro de “El Principito”, escrito por Antoine de Saint-Éxupéry.

Por eso diseñamos algunas joyas inspiradas en él, de las cuales por ahora hemos lanzado dos. De la que trata hoy mi post, es la representación de la famosa “boa que digería a un elefante“, (como describe el autor en la primera página del libro).

La mayoría de los adultos, de forma equívoca, relacionan “El Principito” como una obra para niños, cuando en realidad son ellos los que más deberían aprender de ella, (y de ellos).

Mi joya es un símbolo de inocencia. Creo que esto es lo último que deberíamos perder. Vivimos en un mundo lleno de reglas, de estructuras, de prejuicios, de “derechos” y “obligaciones”. Nos importa mucho el qué dirán. Solemos hacer y decir lo que diga o acepte la “masa“. Nos cuesta mucho pensar por nosotros mismos.

Sólo nos atrevemos a decir algo cuando está socialmente aceptado o “de moda“. Y cuando alguien se sale un poco de esas casillas, los demás piensan que está loco, que es raro, o que, por supuesto, no tiene razón.

Los niños son diferentes. Aún no están viciados por nuestra manera de ver el mundo, y por nuestros patrones y estereotipos de vida. Los pequeños lo ven sin ninguna idea errónea metida en la cabeza. Ven el mundo desde sus propios ojos y corazón, desde lo esencial, desde la “boa que digería el elefante”. Sin filtros.

Son ellos los que deberían reírse de nosotros, y de nuestra involución.

Os dejo a continuación el extracto del libro:

“(…) Mi dibujo número 1. Era así:

Enseñé mi obra de arte a las personas mayores y les pregunté si mi dibujo les asustaba.

-¿Por qué habría de asustar un sombrero? – me respondieron.

Mi dibujo no representaba un sombrero. Representaba una serpiente boa que digería un elefante.

Dibujé entonces el interior de la serpiente boa a fin de que las personas grandes pudieran comprender. Siempre necesitan explicaciones.
Mi dibujo número 2 era así:

Las personas grandes  me aconsejaron que dejara a un lado los dibujos de serpientes boas abiertas o cerradas, y que me interesara un poco más en la geografía, la historia, el cálculo y la gramática. Así fue cómo, a la edad de seis años, abandoné una magnífica carrera de pintor. Había quedado desilusionado por el fracaso de mis dibujos número 1 y número 2.

Las personas grandes nunca comprenden nada por sí solas y es muy aburrido para los niños tener que darles una y otra vez explicaciones.”

Belle.

 

2 comentarios de ““Boa que digería un elefante”

  1. Eva dice:

    Así es esta sociedad llena de prejuicios, normas y “ verdades”.
    Belle eres una pintora excelente, sigue pintando lo que tú ves y sientes

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