Septiembre: el regreso a nuestra mujer salvaje

Septiembre siempre trae consigo un aire de renovación. El verano termina, los días se acortan y muchas veces sentimos que volvemos a una rutina que nos desconecta de lo que somos en esencia.

Este verano me he leído “Mujeres que corren con los lobos.”

Me lo recomendó una amiga que me dijo que le cambió la vida. Este libro que me recordó algo fundamental: todas tenemos dentro una mujer salvaje, instintiva, libre y creativa, que a veces queda atrapada bajo capas de obligaciones, expectativas y prisas. Cuando nos desconectamos de ella, nos sentimos alicaídas, como si nos faltara fuerza vital.
La autora, Clarissa Pinkola Estés, explica que para reencontrarnos con esa mujer salvaje necesitamos volver a lo esencial: escuchar nuestra intuición, rescatar lo que hemos olvidado de nosotras mismas, y vivir con autenticidad. Es un llamado a correr libres, a no silenciarnos, a ser dueñas de nuestra voz y de nuestro brillo.

 Ser sirena es volver a ti
Esa idea conecta profundamente con el espíritu de nuestra colección Sirena. Porque las sirenas, como la mujer salvaje, no se dejan domesticar. Son libres en la calma y en la tormenta, habitan el mar sin miedo, y brillan desde su esencia.
La colección nace como un recordatorio de que también tú eres sirena. Que puedes llevar contigo un amuleto que te recuerde tu fuerza, tu libertad y tu capacidad de brillar incluso cuando el verano termina y la rutina amenaza con apagarte.

 Septiembre como oportunidad
Lejos de ser un final, septiembre es una oportunidad de renacer. Un segundo comienzo en el año para reconectar con tu mujer salvaje, con tu instinto y con todo aquello que te hace auténtica.
Y qué mejor manera de recordarlo que con un símbolo: una joya que sea más que un accesorio, un amuleto que te devuelva al mar interior que nunca te abandona.
Porque ser sirena es, en el fondo, volver a tu esencia.

Te dejo el link de la Colección Sirena aquí

Con cariño,

Sandra.